Escalada en el conflicto Rusia-Ucrania afecta el comercio agrícola y las exportaciones de granos.
Desde el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania en febrero de 2022, el conflicto ha tenido un impacto significativo en los mercados agrícolas, especialmente en términos de fluidez del comercio y exportaciones de granos. Mientras Rusia ha mantenido su producción y exportación con normalidad, Ucrania ha enfrentado dificultades para exportar debido a la devastación de su producción y las restricciones comerciales impuestas por Rusia.
Para mitigar las dificultades de exportación de Ucrania, se acordó en varias ocasiones, con la ayuda de la ONU y Turquía, un “corredor seguro de granos” que le permitía exportar sus productos agrícolas. Sin embargo, estos acuerdos se han ido renovando por períodos de tiempo cada vez más cortos, lo que indica una creciente tensión en el conflicto.
En particular, en los últimos días, el presidente ruso Vladimir Putin ha enfatizado su retiro del acuerdo de grano, bombardeando uno de los principales puertos utilizados en el acuerdo (Odessa) durante varios días. Esta acción ha generado incertidumbre y dificultades para la reanudación del acuerdo de exportación de granos, especialmente considerando que las exportaciones de Ucrania suelen aumentar en agosto con el incremento de las exportaciones de trigo.
La situación también se ve complicada por las restricciones impuestas por países del este europeo hacia las mercaderías de Ucrania, lo que limita las posibilidades de exportación hacia esta región y presiona a la baja los precios de los granos ucranianos.
Aunque se espera un volumen de exportaciones menor que en años anteriores debido a la caída de la producción por el conflicto, aún se prevé que Ucrania exporte una cantidad significativa de sus principales granos y subproductos. No obstante, las opciones de exportación son limitadas en el corto plazo, y la posibilidad de utilizar Moldavia como una ruta alternativa está sujeta a consideraciones y limitaciones.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, escribió en un artículo publicado el lunes temprano que Rusia se retiró del acuerdo de granos del Mar Negro que aseguraba la exportación segura de granos de Ucrania porque el acuerdo perdió su sentido.
“La continuación del ‘acuerdo de granos’, que no justificaba su propósito humanitario, ha perdido su sentido”, dijo Putin, según el artículo publicado en el sitio web del Kremlin.
Diciendo que las condiciones de Rusia para la extensión fueron ignoradas, Moscú abandonó la semana pasada el acuerdo que permitió a Ucrania exportar granos desde sus puertos del Mar Negro hace un año, a pesar de la guerra, para aliviar una crisis alimentaria mundial.
Sin embargo, las demandas clave que Putin presentó la semana pasada para que Moscú regrese al acuerdo no se referían directamente a fines humanitarios.
Después de abandonar el acuerdo, Rusia ha estado atacando los puertos ucranianos de exportación de alimentos casi a diario. Un ataque el domingo en el puerto sureño de Odesa mató a una persona e hirió a varias más.
Anticipándose a la segunda cumbre Rusia-África que tendrá lugar en San Petersburgo el jueves y el viernes, Putin dijo que Rusia espera una cosecha récord este año.
El conflicto en el Mar Negro entre Rusia y Ucrania ha desencadenado un escenario de incertidumbre en los mercados de commodities agrícolas. La ruptura del acuerdo y los continuos ataques en la zona de Odesa han llevado a una presión alcista en los precios de los principales commodities agrícolas.
Además, el clima amenazante en la zona central de Estados Unidos ha generado preocupaciones sobre los cultivos en esta región clave para la producción agrícola. Los pronósticos climáticos están siendo seguidos de cerca, ya que las condiciones adversas podrían afectar negativamente los rendimientos y la oferta de productos agrícolas en esta importante región productora.
El nerviosismo en los mercados ha llevado a un estado de pánico, lo que ha generado una reacción volátil en los precios de los commodities agrícolas a nivel mundial. Sin embargo, algunos analistas están considerando la perspectiva a largo plazo y observan que, a pesar de los eventos actuales, hay indicios de una buena cosecha de trigo en Rusia y otros países de la Unión Europea, lo que podría ayudar a mantener una oferta suficiente de este grano en el mercado.
El conflicto en el Mar Negro y las amenazas climáticas en Estados Unidos han sido los principales factores que han influenciado los mercados de commodities agrícolas durante la semana pasada. Aunque ha habido preocupación y pánico, se observa que la producción de trigo en Rusia y otras regiones se mantiene sólida, lo que podría atenuar la posibilidad de una escasez de este grano. Sin embargo, la situación sigue siendo incierta y los mercados seguirán atentos a los acontecimientos en estas áreas clave para la producción agrícola.
En resumen, la escalada en el conflicto entre Rusia y Ucrania está afectando negativamente el comercio agrícola y las exportaciones de granos de Ucrania. La incertidumbre sobre la reanudación del acuerdo de exportación y las restricciones comerciales están generando dificultades para encontrar salidas para la producción de granos ucranianos en el mercado internacional.