Por Esteban Moscariello, Ejecutivo Comercial en DRC (Díaz Riganti Cereales)


En mayo cayó fuerte el precio de la oleaginosa. Crisis económica en los países compradores y proyecciones de aumento del procesamiento.
Se espera un fuerte crecimiento en el procesamiento de los principales productores de soja durante la temporada 2023/24.



La semana fue corta en Estados Unidos debido al feriado del Día de la Memoria y tuvo un balance positivo para los precios de los commodities agrícolas. Aunque los precios de los commodities agrícolas aún enfrentan presión bajista, hubo un rebote en los últimos días. El trigo de primavera cayó por debajo del maíz en Chicago, lo cual es poco común en el mercado, debido a la falta de demanda y a los amplios inventarios en otros países. Las ventas de exportación avanzan lentamente y los países importadores enfrentan problemas económicos y debilidad de las monedas. El maíz fue el único commodity que tuvo una mejora de precios en mayo, aunque también experimentó volatilidad. Se registró un recorte en los precios del maíz esta semana, pero se espera que las lluvias en junio sean clave para evitar pérdidas en los rendimientos potenciales.

Durante la semana pasada, el trigo de primavera en Estados Unidos experimentó una caída inusual en el mercado, situándose por debajo del precio del maíz. Esta disminución se debe a la falta de demanda del trigo estadounidense y a los abundantes inventarios en otros países, lo que ejerce presión a la baja sobre los precios. Aunque las ventas de exportación avanzan lentamente en comparación con años anteriores, los principales países importadores están enfrentando problemas económicos, crisis de deuda y una debilidad en sus monedas frente al dólar, lo que limita su capacidad para pagar precios más altos. El trigo de primavera en Chicago cerró la semana con una leve suba de 1 usd/t, gracias a los repuntes ocurridos al final de la semana, alcanzando un precio de 228 usd/t.

En contraste, el maíz fue el único de los principales commodities agrícolas que experimentó una mejora de precios en mayo, con un incremento del 1.5% en seguimiento de los contratos de futuros más activos. Sin embargo, el mercado empezó a reflejar la incertidumbre climática, especialmente en relación al maíz, lo que generó preocupación entre los traders. Aunque hubo una disminución en los precios durante esta semana después de una recuperación constante hasta el viernes, el impulso alcista al final de la semana logró mantener un balance positivo. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) comenzó a publicar las condiciones nacionales del maíz, estimando que el 69% del cultivo se encuentra en un estado bueno/excelente, en línea con el promedio de los últimos años. El mes de junio es crucial, ya que se espera que las lluvias alcancen niveles normales o superiores a la media para evitar pérdidas en los rendimientos potenciales. El maíz cerró la semana con un aumento de 2 usd/t, alcanzando un precio de 239.75 usd/t.

El mes de mayo fue desfavorable para la soja y sus subproductos, con la oleaginosa cayendo un 8.4%, el aceite retrocediendo un 10.6%, y la harina de soja cayó un 9%, lo cual afectó los márgenes de la industria. A mediados de la semana pasada, la soja alcanzó mínimos no vistos desde finales de 2021, pero logró recuperar valor gracias a compras de oportunidad y una tendencia alcista en los días siguientes. La sobreventa que vimos por los indicadores técnicos atrajo a los compradores. Además, el hecho de que Estados Unidos esté comprando soja de Brasil, algo no muy frecuente en el mercado, limitó las caídas y nos mostró la baja cotización de la soja sudamericana. En general, la campaña 2023/24 comenzará con reservas históricamente altas en los principales países productores (Estados Unidos, China, Brasil y Argentina), lo que explica los ajustes en los precios. Al final de la semana, la soja cerró con un aumento semanal de 5.61 usd/t, alcanzando un precio de 497 usd/t. Por otro lado, la harina de soja terminó la semana en 397.8 usd/tc, con una disminución de 4.4 usd/tc en la última semana.

Desafíos y presiones en el mercado de commodities y la economía global

El panorama para los próximos meses en el mercado de commodities no es favorable. Las commodities en general están teniendo un mal desempeño debido a la preocupación por la recuperación económica de China, las revisiones a la baja en el crecimiento global, la reducción de la liquidez y la reversión de los fundamentos de los inventarios ajustados para algunas commodities. En cuanto al desempeño de las diferentes clases de commodities, sólo los metales preciosos y las soft commodities han tenido un desempeño positivo este año. Además, se han anunciado recortes en la producción de petróleo por parte de la OPEP+ debido al desequilibrio entre la oferta y la demanda, especialmente en Asia.

Brasil como principal proveedor y EE.UU. como consumidor de aceites vegetales

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha señalado importantes consideraciones para el complejo de la soja en los próximos meses, impactando la oferta global de soja, el procesamiento y el consumo de aceite de soja. Se prevé que Brasil se consolide como el principal proveedor mundial de soja, mientras que Estados Unidos se convertirá en un importante consumidor de aceites vegetales. Esta configuración tendrá un impacto significativo en la oferta global de harina de soja y los márgenes de procesamiento. Se espera un aumento sustancial en la oferta global de soja para el período 2023/2024, con un crecimiento destacado en Sudamérica y China alcanzando niveles récord de producción. Estas tendencias marcarán el panorama en el complejo de la soja en los próximos años.

Se espera un fuerte crecimiento en el procesamiento de los principales productores de soja durante la temporada 2023/24. Brasil y Estados Unidos agregarán 5 millones de toneladas adicionales para la próxima temporada, mientras que se espera que Argentina regrese a la normalidad a partir de mayo de 2024, cuando también aumentará su capacidad de procesamiento a nivel global.

Sumando el crecimiento de Argentina, Brasil y Estados Unidos, se espera un aumento de más de 13 millones de toneladas en el procesamiento para la próxima campaña, en comparación con una disminución de casi 8 millones en la temporada actual.

El total de procesamiento de soja en estos tres países. Se estima que el procesamiento total en 2022/23 alcance los 141.7 millones de toneladas y los 155 millones en 2023/24.

Este aumento se debe a nuevos proyectos y expansiones en Estados Unidos para satisfacer el crecimiento de la producción de diésel renovable, así como a nuevos proyectos en Brasil que están entrando en funcionamiento. Por un lado, la demanda de aceite de soja sigue creciendo, pero, por otro lado, la oferta de harina de soja será un desafío para las industrias.

En mayo, la volatilidad de la soja ha experimentado un aumento significativo. Este incremento en la volatilidad refleja una mayor incertidumbre en el mercado y por supuesto, un potencial de oportunidad. El clima será el factor principal a observar en EE.UU., ya que es probable que los mercados reaccionen ante cada actualización de los modelos meteorológicos. Además, el viernes (9) se dará a conocer una nueva perspectiva de oferta y demanda por parte del USDA, que suma un cierre significativo a la semana.