En un contexto turbulento por las restricciones sanitarias en China y el conflicto en el mar Negro, las condiciones para la siembra en Brasil y Argentina son protagonistas.
En Brasil, las siembras de soja avanzan, pero están ligeramente atrasadas debido a las lluvias. Foto ROBERTO PERA
El comercio está cada vez más preocupado por la economía global, especialmente con los casos elevados de Covid en China y lo que probablemente le harán a la economía del país. Se estima que 200 millones de personas en China se encuentran actualmente encerradas, lo que sin duda está afectando la demanda de productos básicos.
Un dólar estadounidense más firme se sumó a la debilidad del mercado. Las lluvias para las zonas más secas de Argentina también redujeron el entusiasmo alcista en el mercado.
En la semana que pasó, la soja terminó acumulando en Chicago una pérdida de -0.6% sobre la posición noviembre, en tanto que la harina de soja ganó +1.8% sobre la posición octubre, mientras que el aceite de soja subió +0.4%.
El mercado ya estaba comenzando a mostrar menos optimismo sobre una extensión del actual acuerdo de exportación en el Mar Negro, lo que comenzaría a empujar a más compradores a otros lugares por necesidades.
Este fin de semana se confirmó que Rusia no continuaría con el corredor de granos del Mar Negro. Moscú suspendió su participación en el acuerdo del Mar Negro el sábado (29). La posición de los fondos en Chicago es vendida por más de 50.000 contratos mientras que en Kansas los fondos tienen una posición comprada de 5.827 contratos. Todo hasta el 25 de octubre.
La sequía y las heladas en Argentina y las lluvias torrenciales en el este de Australia se han sumado a las preocupaciones sobre el suministro de trigo, ya que plantean dudas sobre la producción en los exportadores de trigo del hemisferio sur.
En el mercado existe la preocupación de que China se retire del mercado a medida que los cierres de Covid surtan efecto en la demanda.
La soja estadounidense del noroeste del Pacífico vuelve a ser competitiva con Sudamérica, que tiene un interés de importación elevado. El mercado está mostrando más interés en la demanda de aceite de soja. Las lluvias en Sudamérica pesaron sobre el complejo soja durante la semana que pasó, especialmente en las regiones más secas de Argentina.
Gripe aviar en Europa y EE.UU.
En los EE. UU., la demanda interna de alimentos para animales se enfrenta a un enemigo peligroso que es la gripe aviar. En 2015, 50,5 millones de aves murieron en el brote más mortífero en los EE. UU., el peor evento de salud animal en el mundo. Este año la situación puede ser similar.
Según datos oficiales del gobierno de EE.UU., al 20 de octubre, más de 47 millones de aves habían muerto debido a infecciones y sacrificios sanitarios. La situación es tan complicada que ya está afectando las exportaciones, la producción de huevos y pavos, además de un enorme factor agravante de la inflación en ese país y su entidad monetaria (Fed).
El problema de este año es una nueva cepa del virus, diferente a las que los productores estadounidenses estaban acostumbrados a tratar. Esta nueva cepa llegó con las aves migratorias, el mayor vector de enfermedades. Según funcionarios del USDA, los agricultores estadounidenses se enfrentan a un subtipo de virus H5N1 que sobrevivió al verano y también se encuentra en Europa, donde hoy está la peor crisis sanitaria de la historia relacionada con la enfermedad. El subtipo conocido como el linaje Goose/Guangdong, se está extendiendo por Europa, donde también ha llevado el sacrificio de más de 50 millones de aves. Según funcionarios del USDA, la amenaza de infecciones puede persistir hasta el verano de 2023.
Preocupación por la falta de diésel en EE.UU.
Ante este escenario, analistas aseguran que el país norteamericano deberá buscar alternativas para avanzar en la refinación y seguir abasteciendo una creciente demanda mundial y todavía no ha comenzado el invierno en el hemisferio norte. Sin embargo, los altos precios que se avecinan e incluso la posibilidad de escasez de petróleo podrían afectar la agroindustria, especialmente en términos de logística.
Estados Unidos, el mayor productor de petróleo del mundo, ha alcanzado en las últimas semanas inventarios cada vez más bajos de diésel, que alcanzaría para apenas 25 días de consumo según diferentes analistas. Este es el peor nivel visto desde 2008, año de la última crisis económica mundial.
La demanda de petróleo estadounidense y sus derivados se ha disparado en los últimos meses en el mercado internacional en medio de las sanciones contra Rusia y que hasta entonces compartía con EE.UU. este mercado global. Sin Rusia, Estados Unidos se ha comprometido a garantizar suministros al mundo.
El precio del diésel en el mercado internacional se está disparando y ya subió 26% en octubre. Biden está considerando diferentes opciones ante la escasez de las reservas de diésel en EE.UU. y todas ellas tienen como riesgo generar un fuerte aumento de precios. Ahora bien, tenemos que pensar cómo repercutirá estas subas en el diésel en la Argentina en un mercado que prácticamente administramos escasez en todo sentido.
Hacia adelante en la semana
Los operadores de soja están atentos a las perspectivas climáticas de Sudamérica y particularmente de Brasil, ya que algunos modelos indican condiciones más secas para el país. El foco vuelve hacia el clima en Brasil.
En Brasil, las siembras de soja avanzan, pero están ligeramente atrasadas debido a las lluvias, que sin embargo son positivas para el futuro.
En Argentina continuamos con una fuerte incertidumbre en un escenario inusual sobre la oferta por la baja venta de los productores y los niveles cada vez más bajos de molienda de soja. La fuerte sequía genera mayor incertidumbre y desconcierto de los productores agropecuarios hacia el futuro y evitan vender en el mercado.
A medida que los niveles del río Mississippi en EE.UU. continúan obstaculizando el envío de granos, al menos algunas terminales de granos en el río ahora han dejado de recibir maíz y soja.
La mejora de las condiciones del agua en algunas partes del río Mississippi también fue de apoyo en el mercado, ya que Saint Louis ha visto aumentar su nivel de agua 3 pies. Sin embargo, otras partes del río no han visto esta mejora y se necesitan muchas más lluvias pronto.
El foco de esta semana está en los movimientos de la Fed. El mercado proyecta que la Fed casi seguramente subirá las tasas de interés otros 75 puntos básicos el 2 de noviembre.
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POR ESTEBAN MOSCARIELLO EJECUTIVO COMERCIAL EN DIAZ RIGANTI CEREALES S.R.L. / CLARIN RURAL